Te has puesto a pensar ¿por qué es que te llama tanto una infografía la atención?
Según estudios de Neuromarketing.la, la mente de una persona puede retener más fácilmente un contenido visual y diagramado que uno escrito en puro texto y es que es así como los niños aprenden a diferenciar colores, letras y reconocen un proceso de asociación entre icono y palabra.
Para una estrategia de inbound marketing crear contenido visual para las personas es muy importante, pero surge la duda, ¿qué necesitas para realizar una buena infografía con un buen contenido?
El día de hoy te traemos los puntos claves para iniciar con el desarrollo de tu propia infografía:
Ten en cuenta que tipo de información es la que deseas mostrar debido a que dependiendo de los datos hay formas óptimas de visualizarlo, solo debes escoger la forma correcta, por ejemplo; si tenés datos como acontecimientos por fechas es muy probable que tengas que utilizar el recurso de una línea de tiempo donde ilustres momentos importantes o si por el contrario necesitas brindar datos estadísticos necesites de un esquema de gráficos.
Un punto muy importante a la hora de realizar la recopilación de tu información es verificar la veracidad y respetar los derechos de autor de la misma, debido a que sea como sea que estés mostrando tu contenido, igualmente podrías exponerte a sanciones por parte de los motores de búsqueda si no sigues los lineamientos de copyright. Y a decir verdad, no hay nada mejor que nutrirse con contenido fresco y original.
De acuerdo a esto podrás identificar lo que necesitás porque, piénsalo por un segundo, ¿diseñarías igual para niños en primaria aprendiendo sobre los números a si tuvieras que exponer una infografía en una conferencia médica sobre la curva del aprendizaje de los niños en primaria? Ahora bien si defines que tu público meta pueden ser niños o adultos dependiendo de la segmentación que hayas elegido, así debes buscar formas de mostrar tu información, para los niños nada muy complejo con datos y cifras, sino algo más intuitivo con colores e ilustraciones; para los adultos, es probable que necesites textos CORTOS y datos estadísticos.
Recordá que podés mezclar formas gráficas de cómo ordenar tu información, el secreto está en cómo potenciar cada uno de los recursos que utilices como un conjunto y no como piezas por separado.
Crea columnas para poder ordenar todo el contenido, y lo más fácil que podés hacer es crear filas y columnas para ubicar los distintos elementos que vas a colocar en la infografía, esto te permitirá primero, encontrar un equilibrio entre los elementos y segundo, poder contar una historia con tu información para poder llevar un hilo conductor en el cual el espectador sea capaz de retener mentalmente los aspectos que le estás explicando. Además recuerda dividir por secciones los temas, para ello te puedes ayudar con bloques de color, líneas punteadas, flechas, entre otros.
Cuando empiezas en la lectura de una infografía qué es lo primero que notas: colores, títulos, ilustraciones o tipografías. Lo cierto del caso, es que una paleta de color armónica y adaptada de acuerdo al tema es muy importante para poder captar la atención del espectador, y lograr tu intención de transmitir tu mensaje.
También deberás ordenar los títulos de acuerdo a su importancia y a su función dentro de la infografía, a los de mayor relevancia podrás darle más énfasis con el uso de su versión bold en cualquier tipografía y darle de mayor a menor un tamaño de fuente, por ejemplo 24 píxeles para los títulos principales y los secundarios en 18 pixeles pero para cuerpo de utilizar regular en cualquier familia tipográfica.
Si te interesó el contenido y querés aprender más sobre cómo la tipografía es un medio importante para tus infografías conocelo en el siguiente contenido.
A modo de conclusión, como podrás ver; tenés que tomar en cuenta tanto la forma en la que recopilas la información, el procesamiento y la clasificación; así como otros puntos importantes que incluyen en en el contenido, tales como tu público meta y la forma en la que muestras este contenido para que la persona a la que tratas de hablar al oido te entienda cada palabra que le transmites y logres que tu posible persona compradora, siga tu camino de conversión y se pueda convertir finalmente en tu cliente.